Créditos de las imagenes: Bar Ilan Press Room.
La proteína de longevidad SIRT6 regula muchos procesos biológicos como el envejecimiento, la obesidad, la resistencia a la insulina, inflamación y metabolismo.
En un nuevo estudio, investigadores de Israel revelan que la proteína también juega un papel crucial en la quema y regulación de la grasa del hígado.
El hígado graso, o esteatosis hepática, que se desarrolla cuando el cuerpo produce demasiada grasa o no la metaboliza de manera eficiente, afecta a alrededor del 25% de la población mundial.
El exceso de grasa se almacena en las células del hígado, donde se acumula y puede causar hígado graso y otras enfermedades.
En un estudio recién publicado en la revista Cell Reports, los investigadores revelan por primera vez el papel de SIRT6 en este asunto.
Se trata de una proteína involucrada en la regulación de muchos procesos biológicos como el envejecimiento, la obesidad, la resistencia a la insulina, la inflamación y el metabolismo. Pero también juega un papel crucial en la quema y la regulación de la grasa del hígado.
SIRT6 también protege contra el hígado graso
SIRT6 regula el metabolismo de las grasas activando otra proteína llamada receptor alfa activado por proliferador de peroxisoma (PPAR-alfa).
Esta proteína promueve la quema de grasa en el hígado.
«SIRT6 es como un malabarista que equilibra y coordina los procesos metabólicos en el cuerpo», dice el autor principal del estudio, el profesor Haim Cohen, de la Universidad de Bar-Ilan.
«Al trabajar junto con PPAR-alfa, SIRT6 puede enviar un mensaje al cuerpo para quemar más grasa.
Esta cooperación es una de las formas en que SIRT6 protege contra el hígado graso y la enfermedad del hígado graso, así como el daño relacionado con la obesidad».
Investigaciones anteriores de Cohen y sus colegas revelaron que el aumento de SIRT6 extiende la vida. Para probar cómo la proteína también podría extender una vida saludable, los investigadores en este estudio aumentaron los niveles regulares de SIRT6 para contrarrestar la disminución de SIRT6 que se encuentra en una dieta alta en grasas y enfermedad del hígado graso.
Utilizando una herramienta computacional desarrollada con el Prof. Ziv Bar Joseph de la Universidad Carnegie Mellon, analizaron diferentes estados metabólicos, como el ayuno y la dieta regular, y descubrieron que una mayor expresión de SIRT6 conduce a la quema de más grasa, específicamente en el hígado.
«SIRT6 no solo funciona con PPAR-alfa para preparar al cuerpo para quemar más grasa y coordinar el metabolismo de las grasas en el hígado, sino que también puede regular otras vías metabólicas relacionadas con la grasa en el hígado, como el metabolismo del colesterol y los triglicéridos», dice Shoshana Naiman, estudiante de doctorado en la Universidad de Bar-Ilan, y coautor del estudio.
El equipo ahora intentará identificar enfoques terapéuticos que puedan apuntar y activar SIRT6.
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