ansiedad
in

Descubrimiento de mecanismo neuronal apunta a posibles tratamientos de la ansiedad.

Créditos de las imagenes: Matthew Rader.

Un tercio de la población mundial es propenso a padecer episodios de ansiedad grave en su vida.

Un nuevo estudio publicado en Cell Reports, da cuenta de posibles nuevos tratamientos para la ansiedad. Investigadores del Instituto Weizmann descubrieron un mecanismo anteriormente desconocido que subyace a la ansiedad. Apuntar a esta vía bioquímica puede ayudar a desarrollar nuevas terapias para aliviar los síntomas de los trastornos de ansiedad.

El laboratorio del profesor Mike Fainzilber ha estudiado, durante casi dos décadas, los papeles neuronales de las proteínas llamadas importinas. Estas proteínas, que se encuentran en todas las células, transportan moléculas al núcleo.

El trabajo de laboratorio realizado anteriormente se centró en el sistema nervioso periférico (todo el tejido nervioso del cuerpo, excepto el cerebro y la médula espinal). El Dr. Nicolas Panayotis, becario postdoctoral, se unió al grupo en 2012. Panayotis decidió averiguar si alguna de las importinas desempeña también un papel en el sistema nervioso central. Es decir, el cerebro y la médula espinal.

Probando el cerebro y la ansiedad.

Panayotis y sus colaboradores estudiaron cinco líneas de ratones, diseñados genéticamente por el laboratorio del profesor Michael Bader en el Centro Max Delbrück de Medicina Molecular en Berlín, para carecer de genes de la subfamilia alfa de las importinas.

Los investigadores sometieron a estos ratones a una batería de pruebas de comportamiento. Encontraron que una línea de ratones, aquellos que carecían de importina alfa-5, destacaban de una manera única: no mostraron ansiedad en situaciones estresantes. Por ejemplo, cuando se colocaron en grandes zonas expuestas o en una plataforma abierta muy elevada.

Después, los investigadores verificaron cómo estos ratones «más tranquilos» se diferenciaban del resto en términos de expresión génica en ciertas regiones del cerebro involucradas en el control de la ansiedad.

Los análisis computacionales apuntaron a MeCP2, un gen regulador conocido que afecta los comportamientos de la ansiedad.

Resultó que la importina alfa-5 era fundamental para permitir la entrada de MeCP2 en los núcleos de las neuronas.

Por otra parte, los cambios en los niveles de MeCP2 en el núcleo afectaron a los niveles de una enzima involucrada en la producción de una molécula de señalización llamada S1P.

En ratones que carecían de importina alfa-5, MeCP2 no pudo introducirse en los núcleos de las neuronas que controlan la ansiedad. Esto redujo la señalización de S1P y disminuyendo la ansiedad.

Experimentos adicionales confirmaron que efectivamente habían descubierto un nuevo mecanismo de regulación de la ansiedad en el cerebro. Luego, los investigadores buscaron moléculas que pudieran modificar este mecanismo.

Se dieron cuenta de que ya existen medicamentos que modulan la señal de S1P; uno de estos medicamentos, el fingolimod, se usa para tratar la esclerosis múltiple.

Cuando los investigadores probaron los efectos del fingolimod en ratones normales, estos ratones mostraron menos ansiedad. Esto, de manera similar a los ratones genéticamente modificados que carecían del gen de la importina alfa-5.

Además, los investigadores encontraron un informe anterior de un ensayo clínico de fingolimod, según el cual el fármaco tuvo un efecto calmante en pacientes con esclerosis múltiple. Ahora, el nuevo estudio podría ayudar a explicar por qué ha sido así.

Nuevos tratamientos para la ansiedad.

«Nuestros hallazgos han abierto una nueva vía para la investigación sobre los mecanismos de la ansiedad», dijo Panayotis.

«Si entendemos exactamente cómo el sistema de circuitos que hemos descubierto controla la ansiedad, esto puede ayudar a desarrollar nuevos medicamentos. Tambien a dirigir mejor el uso de los existentes, para aliviar sus síntomas».

«Los medicamentos actuales para la ansiedad tienen una eficacia limitada o efectos secundarios indeseables, lo que limita su utilidad.

Nuestros hallazgos pueden ayudar a superar estas limitaciones. En investigaciones complementarias, ya hemos identificado una serie de candidatos a medicamentos dirigidos a la ruta recién descubierta».

Los hallazgos del estudio también arrojan una nueva luz sobre las enfermedades genéticas raras. Estas caracterizadas por mutaciones en el gen MeCP2. Se trata del síndrome de Rett y elsíndrome de duplicación de MeCP2.

Ambas enfermedades se caracterizan, entre otros síntomas, por la ansiedad. La identificación de los mecanismos precisos responsables de la entrada de MeCP2 en los núcleos de las neuronas puede, en el futuro, ayudar a desarrollar terapias para estas dos enfermedades.

 

Quieres conocer mas tecnología israelí?

Si respondiste “si” Sumanos tambien en Twitter.