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Investigadores de Israel tienen como objetivo limitar el alcance de futuras emergencias nucleares. El estudio que les mostramos a continuación busca mejorar la seguridad de las plantas de energía nuclear.
Un estudio dirigido por el doctor Erez Gilad que es portada en la prestigiosa «Revista Internacional de Investigación en Energía»; discute formas de aumentar la seguridad de las plantas de energía nuclear.
Se espera que el consumo mundial de energía siga creciendo incluso cuando la comunidad internacional intenta limitar las emisiones de carbono.
Es probable que la energía nuclear desempeñe un papel cada vez más destacado en las próximas décadas. Esto mientras las potencias mundiales intentan garantizar un suministro confiable. Deben hacerlo y pronto para una población en crecimiento sin poner en peligro el medio ambiente.
Al mismo tiempo, sin embargo, los recuerdos de accidentes a gran escala en Chernobyl (1986) y Fukushima, Japón (2011) estan muy frescos en la memoria colectiva. Ambos casos continúan proporcionando ilustraciones aleccionadoras de la necesidad de mantener procedimientos de seguridad en las instalaciones nucleares.
Este problema crecerá en importancia en los próximos años a medida que la flota actual de reactores nucleares envejezca. Estos eventualmente no van a cumplir con los requisitos de seguridad.
Pero los procedimientos de seguridad en los reactores nucleares son, por definición, casi imposibles de probar. Esto es debido a las temperaturas extremadamente altas en el interior de los reactores durante los accidentes graves.
Actualmente se están desarrollando nuevos tipos de reactores, conocidos como Generación IV. Ellos implementan modelos de seguridad que se centran en las tecnologías enfriadas por plomo y sodio.
Estos diseños futuros han atraído la atención entre la comunidad nuclear internacional. En parte porque no se han resuelto todos los desafíos relacionados con su operación segura en condiciones de accidentes.
Seguridad de las plantas de energía nuclear.
Estos desafíos son el foco de un nuevo estudio realizado por el doctor Erez Gilad, , su colega, el Dr. Patrick Blaise y el estudiante de BGU, el Dr. Marat Margulis.
Ellos han publicado el artículo de portada de la edición de febrero del International Journal of Energy Research, una prestigiosa revista académica.
En los efectos representativos de los efectos de la reactividad del combustible fundido Gen-IV en el análisis ZEPHYR ZPR – LFR, los investigadores presentan un enfoque innovador para estudiar la reacción en cadena de la fisión nuclear durante los accidentes graves. Revisan la fusión del núcleo en los reactores Gen-IV, que se producen a una temperatura de más de 2500° C.
“Los accidentes de Chernobyl y Fukushima crearon conciencia y pusieron el tema de los accidentes (SCA) en la agenda científica. Pero investigar métodos para reducir el riesgo de una emergencia nuclear es difícil porque los experimentos neutrónicos relacionados con SCA tendrían que involucrar un núcleo crítico que sufrirá un colapso a 3000 ° C. Esto es lo que hace que los experimentos sean poco prácticos», dice Gilad.
«Como resultado, la mayor parte de la I+D relacionada con el comportamiento neutrónico durante SCA se basa en simulaciones por computadora.
Este estudio analiza los beneficios del reactor de física experimental planificado ZEPHYR (que se construirá en Francia) para abordar estos desafíos. Se trata de de la prevención, la detección temprana y la mitigación de emergencias nucleares.
Ese es un gran paso hacia el objetivo final de estudiar los accidentes graves en una escala central completa» agrega.
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